Se relajan las restricciones al turismo y las medidas de seguridad en varios países, mientras los ciudadanos tratan de adaptarse a una nueva normalidad nunca conocida.
PUBLICIDADLa reanudación de la Liga de fútbol, el próximo 8 de junio, es una prueba más de la inminente llegada de la nueva normalidad en España, donde el Gobierno anunciaba este sábado la apertura del país al turismo extranjero a partir del mes de julio. En las calles, el ambiente es otro, con tiendas y bares abiertos aunque aún con medidas de restricción y a la espera de dar este lunes un nuevo paso hacia el ansiado fin de la larga desescalada.
"España recibe más de 80 millones de visitantes cada año, por lo que anuncio que a partir de julio se permitirá el regreso de los turistas extranjeros a España en condiciones de seguridad", decía en su comparecencia el presidente Pedro Sánchez. "Los turistas extranjeros pueden desde ahora empezar a planear sus vacaciones en nuestro país".
Italia ha sido uno de los países más afectados por la crisis del coronavirus, pero también ve ya la luz al final del túnel. Los famosos museos vaticanos se preparan para reabrir sus puertas el 1 de junio, siempre bajo numerosas medidas de seguridad y con cita previa. En Croacia, por su parte, ya se forman atascos para acudir a la playa. Como el resto de países del Adriático, su economía depende en gran medidad del turismo, por lo que el Gobierno no impondrá de momento cuarentena alguna a aquel que entre en el país.
Macron rectifica y Merkel se defiende
En Francia han reabierto las iglesias, en las que, como en cualquier otro lugar, debe respetarse el distanciamiento social y en donde está prohibidos gestos tan habituales como dar abrazos o estrechar la manos. Este sábado Emmanuel Macron rebajaba sus medidas y pasaba a aplicar cuarentena voluntaria a británicos y españoles que lleguen al país en avión.
Desde Alemania, la canciller Angela Merkel defendía este sábado las medidas adoptadas frente a unas críticas crecientes en todo el país. Este domingo Alemania vive una nueva jornada de movilizaciones contra las actuales restricciones.
Tal vez la imagen que mejor refleje la situación que vive buena parte de Europa sea la vista este sábado en Barcelona, donde el equipo español de natación sincronizada se veía obligado a entrenar en el exterior del recinto, ya ocupado, para respetar las medidas de distanciamiento. Toca asumir la nueva normalidad y adaptarse a ella.