Este miércoles se ha celebrado una conferencia de países latinoamericanos contra el Covid-19 en busca de mecanismos de financiación y apoyo, en la que han participado los presidentes de diez países, e instituciones como el FMI, el Banco Mundial o las Naciones Unidas.
Latinoamérica, epicentro de la pandemia, afronta el doble desafío de superar la crisis sanitaria y reactivar las economías de los países de la región, cuyo estado, en muchos casos, ya era precario antes del Covid-19, acuciado por la pobreza y las desigualdades sociales.
Este miércoles se ha celebrado una conferencia de países latinoamericanos contra el Covid-19 en busca de mecanismos de financiación y apoyo, en la que han participado los presidentes de diez países, e instituciones como el FMI, el Banco Mundial o las Naciones Unidas.
El presidente del Gobierno de España Pedro Sánchez, que ha apadrinado esta conferencia, adelantaba algunos instrumentos contra la crisis como alivios de deuda o restructuración.
"Evidentemente la estabilidad fiscal, la cambiaria, la financiera, la justicia social, la digitalización y la transición ecológicam en términos de justicia social deben protagonizar, a mi juicio, las estrategias de recuperación para asegurar un crecimiento sostenido, sostenible e inclusivo, sin olvidar la ciencia y la educación", dijo Sánchez en la conferencia telemática.
En América Latina, 29 millones de personas se exponen a la pobreza y 16 millones a la extrema pobreza por la crisis del Covid.
En un contexto mundial de recesión y de caída del PIB mundial del 4,9%, para el 2020, según estimaciones del FMI, los retos para la región de América Latina son aún más apremiantes.
A la conferencia han participado Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Perú, Paraguay, República Dominicana, Uruguay y Barbados. No lo han hecho Venezuela, Cuba y Nicaragua, ni tampoco las grandes potencias económicas de la región como son Brasil o México.