Los 'techos azules' de lona que siguen cubriendo muchas casas de la isla se han convertido en el símbolo del fracaso de las autoridades para llevar a cabo la reconstrucción
Los techos azules, compuestos por simples lonas para cubrirse de la intemperie, se han convertido en Puerto Rico en el símbolo de un fracaso. Casi tres años después del paso arrasador del huracán María, decenas de miles de hogares siguen estando gravemente dañados ante la incapacidad de las autoridades para llevar a cabo la reconstrucción.
Marián Colón, madre soltera, con dos hijos a cargo, vio cómo en septiembre de 2017 el huracán arrancaba de cuajo el tejado de su casa. Todavía no ha podido volver.
"Solo estamos luchando para obtener lo que por derecho podemos tener, que es una residencia, y no solo para mí, para mis hijos", dice Marián.
El huracán María dejó más de 4600 muertos y una isla arrasada, con **importantes daños en 780.000 viviendas, algunas completamente destrozadas. **
Durante el año siguiente, las autoridades locales hicieron reparaciones relativamente pequeñas en unas 100.000 casas, utilizando los fondos federales de emergencia.
Ninguna casa reparada con el programa R3 del Gobierno puertorriqueño
Después se diseñó el programa R3 (reparar, reconstruir o reubicar), primer gran esfuerzo del Gobierno puertorriqueño para solucionar el problema. Unos 27.000 propietarios de viviendas presentaron su solicitud. Otros 900 están en la lista de espera. Ninguno ha visto todavía su casa reconstruida.
"Esos fondos, podrían ser una opción para miles y miles de familias que siguen esperando para tener una vivienda digna -dice Ariadna Godreau, directora de Ayuda Legal Puerto Rico-. Sin embargo, tres años después de que los huracanes María e Irma azontaran la isla y un año después de abrirse el proceso de solicitud, no tenemos ni una sola casa reparada con esos fondos".
Puerto Rico es una isla frecuentemente sacudida por tormentas y huracanes, que se pregunta qué ocurrirá si un fenómeno de dimensiones similares se repite, con miles de personas viviendo bajo tejados de lona.