Añorar tomarse una cerveza con los amigos, ya es cosa del pasado en Inglaterra. Este lunes han abierto los pubs, con algunas restricciones.
Ir de tiendas, al gimnasio o a la peluquería, ya es posible en Inglaterra. En enero el Gobierno impuso restricciones para frenar el aumento de las infecciones, relacionadas con una nueva variante más transmisible identificada por primera vez en el sureste de Inglaterra. Ahora la gente vuelve a sonreír aunque sea bajo la mascarilla.
Kate Lossius, consultora de comunicación:
"Fantástico, se siente como un poco de normalidad. Y también se siente como un regalo".
Abre la hostelería, pero sólo en terrazas, con reserva previa de mesa y limitada a 6 comensales. Da igual el frió, los londinenses se han apresurado a brindar con unas pintas matinales por este deseado paso hacia la reanudación de la vida normal.
"¡Ah, es delicioso gracias! Es como si los ángeles recorrieran mi lengua"-dice un joven al saborear su cerveza.
Este otro está sólo, pero feliz:
" Mi padre iba a venir, pero luego dijo, soy demasiado viejo y hace mucho frío, así que vine solo y me traje un libro".
Un grupo de chicas espera a probar sus pintas:
"¡Sí, estamos deseando bebernos la primera cerveza y pasar una buena tarde."
Y este señor recupera la memoria al primer sorbo de cerveza:
"Es como un recuerdo que había perdido y que acabo de recuperar".
El confinamiento y la vacunación masiva han permitido dar un respiro a los ingleses, el martes empieza la inmunización de los mayores de 40 años. Los demás territorios del Reino Unido, Escocia, Gales e Irlanda del Norte, están siguiendo sus propios planes.