Por Ingrid Melander y Belén Carreño
MADRID, 4 may (Reuters) - La dirigente regional conservadora de la región de Madrid obtuvo el martes una aplastante victoria electoral, impulsada por su negativa a cerrar bares y comercios durante la pandemia de COVID-19.
Cientos de simpatizantes con banderas se reunieron frente a la sede del Partido Popular (PP) coreando "¡Libertad! Libertad!" mientras los resultados provisionales mostraban que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, había duplicado con creces su resultado de las anteriores elecciones (2019).
"Libertad" fue el lema de la campaña de Ayuso, que confió en su estrategia laxa de restricciones de COVID para atraer a unos votantes cansados de las restricciones impuestas para luchar contra la pandemia.
"La libertad ha ganado", dijo a sus seguidores el radiante líder del PP, Pablo Casado. Los votantes "confiaron en la gestión (de Ayuso) de la pandemia". "Libertad, siempre, siempre", dijo una emocionada Ayuso.
Los críticos acusan a Ayuso de descuidar la atención sanitaria para dar prioridad a la economía. Sin embargo, se ganó el apoyo de muchos madrileños al negarse a cerrar bares y restaurantes durante la pandemia.
La Comunidad de Madrid, donde viven siete de los 47 millones de españoles, registró el martes 343 casos de COVID-19 por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, frente a una media nacional de 213. La ocupación de las unidades de cuidados intensivos por parte de enfermos de COVID-19 es la más alta de España, con un 44%.
¿APOYO DE LA EXTREMA DERECHA?
Ayuso se quedó a las puertas de conseguir los escaños suficientes para gobernar la región sin el apoyo de otro partido, según los resultados preliminares, con el 99,93% de los votos escrutados, que le permiten obtener 65 escaños, frente a los 30 de 2019.
El PP ha gobernado la región de la capital durante los últimos 26 años y la contundente victoria probablemente impulsará al grupo a nivel nacional. En el Congreso de los Diputados, el PP es el segundo partido con mayor peso después de los socialistas, que gobiernan en coalición con la formación de izquierdas Unidas Podemos.
El partido de extrema derecha Vox, que pasó de tener 12 escaños a unos 13, dijo que apoyaría a Ayuso en una asamblea regional de 136 escaños.
Vox ya apoyaba a la coalición del PP y el partido de centro-derecha Ciudadanos y la cuestión es ahora si pedirá formar parte del nuevo gobierno.
Ciudadanos se desplomó y no obtuvo ningún escaño, frente a los 26 que logró hace dos años.
Los socialistas del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pasan de 37 escaños a 24, lo que no les permite, ni a ellos ni a otros partidos de izquierda, destituir a Ayuso.
A diferencia de otras elecciones de la era COVID en los últimos meses, la participación fue alta, en torno al 76%, muy superior al 64% de 2019.
(Información de Belén Carreño, Clara-Laeila Laudette, Ingrid Melander, Susana Vera, Cristina Galan, Emma Pinedo y Elena Rodríguez, escrito por Ingrid Melander, editado por Giles Elgood y Mark Heinrich, traducido por Tomás Cobos)