Por Renju Jose y Jonathan Barrett
SÍDNEY, 23 jul - El estado de Nueva Gales del Sur de Australia informó el viernes su mayor aumento diario en nuevos casos de COVID-19 este año, lo que desencadenó un endurecimiento de las restricciones en Sídney, en lo que las autoridades estatales llamaron una "emergencia nacional" que ya ha descarrilado el repunte económico del país.
La primera ministra de Nueva Gales del Sur, Gladys Berejiklian, también planteó la probabilidad de que el requerimiento de quedarse en casa para la ciudad más grande del país se extiendan más allá de la fecha límite actual del 30 de julio.
"No hay duda de que las cifras no van en la dirección que esperábamos en esta etapa", dijo Berejiklian al anunciar 136 nuevos casos en Nueva Gales del Sur.
Desde que se detectó a mediados de junio el primer caso en un conductor de limusina de Sídney, que transportaba tripulaciones de vuelos internacionales.
El brote de la variante delta de coronavirus, altamente contagiosa, se trasladó a través de las fronteras a los estados vecinos de Victoria y Australia del Sur, lo que obligó a las autoridades a confinar a más de la mitad de la población del país. Esto ha paralizado gran parte de la economía australiana en un momento de reapertura en otras partes del mundo, incluidos Reino Unido y Estados Unidos..
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, suspendió este viernes durante al menos ocho semanas la llamada "burbuja de viajes" con Australia que permite el movimiento entre los dos países sin cuarentena.
Al menos 53 de los nuevos casos en Sídney fueron contagiosos entre los miembros de la comunidad local antes de ser diagnosticados. Las autoridades han dicho que la cifra debe ser cercana a cero para que se levante el confinamiento en la capital de Nueva Gales del Sur.