Para Marina Lebedeva, directora ejecutiva de la compañía Medina Art, compañía socia del proyecto EcoDesign Circle 4.0, implementar la economía circular y los procesos de ‘ecodiseño’ tiene un impacto positivo para las empresas y contribuyen a la conciencia ambiental.
Para Marina Lebedeva, directora ejecutiva de la compañía Medina Art, compañía socia del proyecto EcoDesign Circle 4.0, implementar la economía circular y los procesos de ‘ecodiseño’ tiene un impacto positivo para las empresas y contribuyen a la conciencia ambiental.
"El propio ‘ecodiseño’, estos principios y estas tecnologías implican un cambio de mentalidad. La gente empieza a pensar de forma diferente. Y, cuando una persona empieza a pensar de forma diferente, toma decisiones de forma diferente y, por tanto, ya no puede trabajar de la misma forma en la que lo hacía antes", declara Marina Lebedeva.
"No solamente en Rusia, sino también en Europa, es muy difícil explicar a una empresa por qué debe dedicar su tiempo y su dinero a avanzar en esta dirección. No estamos diciendo que la ecología se oponga a los intereses económicos de una empresa o de los consumidores, no. Estamos diciendo que la economía circular nos da la oportunidad de construir procesos empresariales de manera que no perjudiquen al medio ambiente y, por otro lado, sean aceptables, útiles y económicamente rentables para las empresas", añade Lebedeva.