MADRID, 13 ago - España comenzó el viernes a enviar a cientos de jóvenes marroquíes, que en mayo cruzaron la frontera con su enclave norteafricano de Ceuta, de vuelta a Marruecos tras alcanzar un acuerdo con Rabat, según informaron medios de comunicación españoles, lo que supone una mejora de los lazos entre ambos países tras una larga disputa diplomática.
La emisora de radio Cadena SER citó fuentes ceutíes que dijeron que los menores ya estaban siendo trasladados a Marruecos en pequeños grupos usando furgonetas desde un complejo deportivo convertido en un centro de recepción improvisado.
No fue posible contactar con representantes de los ministerios de Asuntos Exteriores e Interior de España ni de la ciudad autónoma de Ceuta.
Marruecos y España se vieron envueltos en una disputa provocada por la admisión en territorio español sin conocimiento de Rabat de Brahim Ghali, líder del movimiento independentista del Sáhara Occidental, a fin de recibir tratamiento médico, lo que provocó una crisis migratoria en Ceuta.
La mayoría de los 10.000 inmigrantes que cruzaron a Ceuta fueron devueltos inmediatamente a Marruecos, pero unos 700 menores no acompañados permanecieron en el territorio español.
La afluencia masiva se interpretó como una represalia de Marruecos por la decisión de España de acoger a Ghali, que regresó a Argelia en junio tras pasar más de un mes hospitalizado. Marruecos considera el Sáhara Occidental como parte de su propio territorio.
El Polisario, apoyado por Argelia, aspira a la formación de un Estado independiente en el territorio, donde España ejerció un gobierno colonial hasta 1975.