Polonia se ha convertido en el nuevo destino de la Unión Europea para los solicitantes de asilo con más de 2 000 peticiones solo este mes y ha registrado más de 4 000 cruces ilegales en lo que va de año. El país piensa cambiar su legislación para agilizar las devoluciones, denuncian activistas.
Polonia se ha convertido en el nuevo destino de la Unión Europea para los solicitantes de asilo con más de 2 000 peticiones solo este mes. Además, Polonia ha registrado más de 4 000 cruces ilegales en lo que va de año. La mayoría ocurre en la frontera con Bielorrusia, donde se ha desplegado el Ejército para vigilar y asistir las devoluciones en el lado polaco.
La mayoría proviene de Irak, Siria y Afganistán.Todos reclaman la protección internacional de Polonia. A pesar de tener derecho a ello, las autoridades polacas no escuchan sus demandas. Por el contrario, llevan aquí más de dos semanas. Asi lo confirma Tahmina Rajabova, traductora y activista de la Fundación Ocalenie.
"La Guardia de Fronteras dijo que los migrantes deben volver a sus países. Hoy le dimos los documentos a los abogados con todos sus datos para ayudarles de alguna manera desde el punto de vista legal".
Según Marcin Sosniak, de la oficina del Defensor del Pueblo, no permitir que los solicitantes de asilo pidan protección en Polonia es contrario a la ley. También le preocupa un posible cambio de legislación que podría criminalizar el cruce de fronteras y dificultar las solicitudes de asilo.
"En opinión del Defensor del Pueblo, este cambio será absolutamente contrario a la Convención de Ginebra sobre los refugiados. También es contraria a la normativa de la Unión Europea, que establece que todos los extranjeros deben tener acceso efectivo al procedimiento de refugiados, e incluso a la Constitución polaca, que permite a los extranjeros la posibilidad de solicitar protección internacional en Polonia", señaló Sosniak.
Por su parte, el subsecretario de Estado del ministerio del Interior polaco, Bartosz Grodecki, confirma que está previsto trabajar en la modificación de la legislación. Destaca la importancia de la protección de las fronteras en el contexto europeo.
"Estamos planeando mejorar ciertos procedimientos que agilizarán la tramitación de las solicitudes de los refugiados y esto es absolutamente una respuesta a lo que está ocurriendo en estos momentos en la frontera. Como Estado miembro, estamos obligados a cumplir nuestras obligaciones comunitarias, es decir, a proteger la frontera estatal de Polonia y la frontera exterior de la comunidad. Nuestros vecinos lituanos están haciendo lo mismo, así como los letones".
La situación en la frontera polaco-bielorrusa no muestra signos de desaceleración. A día de hoy, ya se están practicando devoluciones en caliente y hay planes para ampliar la valla. Como resultado, habrá más migrantes concentrados a lo largo de la frontera. Con un acceso limitado a la ayuda, acompañado de un bloqueo legal, nos enfrentaremos a una crisis humanitaria.