En París o Londres tanto autoridades como ciudadanos rindieron homenaje a los fallecidos durante un conflicto que duro más de cuatro años y que concluía el 11 de noviembre de 1918.
PUBLICIDADEuropa conmemora, un año más, el Día del Armisticio. Como cada 11 de noviembre desde hace 103 años, tanto la autoridades como el pueblo de Francia quisieron rendir sentido homenaje a los caídos durante la Gran Guerra, la Primera Guerra Mundial, que dejó más de 18 millones de muertos.
Este año, el presidente Emmanuel Macron quiso recordar durante la ceremonia al último Compañero de la Liberación de la Seguna Guerra Mundial, Hubert Germain, que fallecía recientemente a los 101 años de edad.
"Estaríamos aquí los franceses?", se preguntaba el presidente de la República. "¿Estaríamos aquí sin Hubert Germain? Con apenas 20 años, lo dejó todo: su casa en la Drôme, su familia y sus amigos, para ir a Londres y pronto, con honor y lealtad, coronarse de gloria en Bir-Hakeim".
En Londres, el Big Ben marcaba el inicio de los dos minutos de silencio con los que el pueblo británico rinde tributo a los caídos durante aquellos largos y cruentos cuatro años. Cientos de veteranos participaron en una marcha con saludo en el Cenotafio de Westminster.
En Ypres, Bélgica, también se recordó a los caídos. Fue junto a la puerta de Menin, un monumento construido en memoria de los soldados británicos y de la Commonwealth que murieron en los combates acontecidos en esta ciudad y sus alrededores.