El fuerte viento ha provocado accidentes empujando vehículos fuera de las carreteras, arrancando árboles y dañando infraestructuras
Camiones varados en un monumental atasco por el mal tiempo en Lituania. Las ventiscas de nieve han paralizado el tráfico en 55 kilómetros de la carretera que une Polonia y los países bálticos.
Los camiones llevan desde el jueves por la tarde varados cerca de la frontera polaca por los accidentes y el viento lateral que empujaba los remolques a la cuneta.
Polonia también cerró su frontera para la entrada de camiones el viernes por la mañana, pero la reabrió unas horas después, mientras que en el lado lituano el tráfico sigue paralizado.
Aunque la autopista E67 es la principal arteria entre Europa Central y los países bálticos, este tramo solo tiene un carril. Y según la normativa lituana, son los propietarios de los camiones los responsables de los accidentes, lo que retrasa la retirada de vehículos atascados.
El viento que ha afectado a las zonas occidentales de Lituania ha provocado accidentes empujando vehículos fuera de las carreteras, arrancando árboles y dañando infraestructuras.
El principal puerto de Klaipeda lleva cerrado desde el miércoles y el servicio postal ha sido retrasado.