18 mar - El Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) declaró el viernes que los países deben ofrecer pruebas gratuitas de COVID-19 a los refugiados de Ucrania para evitar brotes, ya que más de tres millones de personas han huido de su país asolado por la guerra.
Las enfermedades infecciosas y los conflictos suelen ir de la mano y el riesgo de propagación de las infecciones podría agravarse aún más, ya que las tasas de vacunación contra la COVID-19 en Ucrania han sido bajas en general, con un 35%, frente a la media de la UE del 71,7%.
Según el ECDC, a las personas que huyen del país se les debe ofrecer un ciclo completo de vacunas contra la COVID-19, así como dosis de refuerzo, si no tienen pruebas de inoculación previa, haciendo hincapié en las personas con mayor riesgo de padecer la COVID-19 grave.
Algunos refugiados ucranianos han huido a países cercanos de Europa, como Polonia, Eslovaquia y Rumanía, mientras que otros buscan desplazarse más al oeste para escapar de la invasión rusa.
Se sabe que los centros de acogida de refugiados tienen un mayor riesgo de brotes de enfermedades. El ECDC dijo que los países deben hacer pruebas en esos centros y tratar de aislar a los que muestren síntomas.
Las cifras, que muestran un aumento global de los casos de COVID-19, podrían anunciar un problema mucho mayor, ya que algunos países también informan de un descenso en las tasas de pruebas, dijo el martes la Organización Mundial de la Salud, advirtiendo a las naciones que permanezcan vigilantes contra el coronavirus.