Por Gopal Sharma
KATMANDÚ -El lunes se desvanecieron las esperanzas de encontrar algún superviviente entre las 22 personas que viajaban a bordo de una avioneta que se estrelló en una ladera del Himalaya un día antes, según las autoridades, ya que sólo quedan dos personas por localizar.
Dos alemanes, cuatro indios y 16 nepalíes iban a bordo del avión De Havilland Canada DHC-6-300 Twin Otter que se estrelló 15 minutos después de despegar de la ciudad turística de Pokhara, a 125 km al oeste de Katmandú, el domingo por la mañana.
"Hay muy pocas posibilidades de encontrar supervivientes", dijo Deo Chandra Lal Karna, portavoz de la Autoridad de Aviación Civil de Nepal.
Los soldados nepalíes y el personal de rescate habían recuperado 20 cadáveres de los restos del avión, esparcidos por una empinada ladera a una altitud de unos 4.420 metros.
La dificultad del terreno y el mal tiempo han dificultado las labores de búsqueda. Una imagen publicada en los medios de comunicación nepalíes mostraba a los socorristas uniformados sacando un cuerpo de los restos y utilizando cuerdas para arrastrarlo en una camilla por una cresta empinada y cubierta de hierba.
"Hay una nube muy espesa en la zona", dijo a Reuters por teléfono Netra Prasad Sharma, el burócrata de mayor rango en el distrito de Mustang, donde tuvo lugar el accidente. "La búsqueda de cuerpos continúa".
En Katmandú, los familiares de las víctimas esperaban a que se trajeran los cuerpos desde el lugar del accidente y la autoridad de aviación dijo en un tuit que aún no se había producido la identificación formal de las víctimas.
"Estoy esperando el cuerpo de mi hijo", dijo Maniram Pokhrel a Reuters, con la voz entrecortada. Su hijo Utsav Pokhrel, de 25 años, era el copiloto.
El avión, operado por la compañía privada Tara Air, se estrelló el domingo por la mañana en medio de un clima nublado, y los restos no fueron detectados hasta el lunes por la mañana por el ejército nepalí.
El destino era Jomsom, un popular lugar de turismo y peregrinación que se encuentra a unos 80 km al noroeste de Pokhara, normalmente un vuelo de 20 minutos.
Sin embargo, el avión perdió el contacto con la torre de control de Pokhara cinco minutos antes de su aterrizaje, informaron los responsables de la aerolínea.
El lugar del accidente está en la región donde se encuentra el monte Dhaulagiri, el séptimo pico más alto del mundo con 8.167 metros, en las proximidades de la frontera de Nepal con China.
El sitio web de seguimiento de vuelos Flightradar24 indicó que el avión, con matrícula 9N-AET, realizó su primer vuelo hace 43 años.
Los accidentes aéreos no son infrecuentes en Nepal, donde se encuentran ocho de las 14 montañas más altas del mundo, incluido el Everest, ya que el clima puede cambiar repentinamente, haciendo que las pistas de aterrizaje en las montañas sean peligrosas.
A principios de 2018, un vuelo de US-Bangla Airlines de Dacca a Katmandú se estrelló al aterrizar y se incendió, matando a 51 de las 71 personas que iban a bordo.