Un escenario efímero y un vendaval devastador fueron la mezcla terrible que acabaron con la vida de un chico de 22 años
Un escenario efímero y un vendaval devastador fueron la mezcla terrible que acabaron con la vida de un chico de 22 años en el Festival Medusa de Cullera, Valencia.
Los fuertes vientos provocaron la caída de varias estructuras y parte de un escenario y han dejado una víctima mortal, 4 hospitalizados y una treintena de heridos.
La organización del festival ha cancelado el evento debido a las severas condiciones climáticas. Las investigaciones previas señalan que este fenómeno meteorológico inesperado, denominado reventón térmico, es el causante de la tragedia. Aun así, la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil continúa con la investigación pericial.
El Ayuntamiento de la localidad afirmó que el festival cumplía todos los permisos y, aunque la Comunidad Valenciana estaba en alerta roja por altas temperaturas acompañadas de rachas de viento, no había ningún tipo de restricción para el litoral.