Según el Ministerio de Defensa ruso, este fin de semana han comenzado a reagrupar sus tropas desde Járkov a la región de Donetsk, justo al sur, para concentrar allí sus esfuerzos militares, mostrando en un mapa la importante retirada del Ejército ruso de la región de Járkov.
PUBLICIDADVarios misiles rusos habrían derribado dos centrales eléctricas en Járkov, segunda ciudad de Ucrania, cercana a la frontera rusa. Un gran incendio en las centrales provocaron cortes de electricidad en el este del país. Los apagones habrían afectado a unos nueve millones de personas en regiones como Járkov y Donetsk.
El presidente Zelenski acusó a Rusia de terrorismo y de atacar infraestructuras críticas, en vez de instalaciones militares, con el objetivo de privar a la gente de luz y calefacción.
Respuesta a la repentina contraofensiva ucraniana
Estos ataques con misiles serían una respuesta rusa a la repentina contraofensiva ucraniana en la provincia de Járkov. Las fue rzas ucranianas afirman haber recapturado unos 3.000 kilómetros desde principios de septiembre y aseguran que sus tropas están a apenas 50 kilómetros de la frontera rusa. Según funcionarios rusos de región de Belgorod, miles de personas han huido de la región de Járkov hacia Rusia ante el avance de las fuerzas ucranianas.
Éxodo hacia Belgorod
"Hoy 1.342 personas han sido alojadas en 27 centros de alojamiento temporal en la región. Estamos preparando el envío de numerosos grupos de 500, 200 y 50 personas a otras regiones", declaró el Gobernador en funciones de la región fronteriza rusa de Belgorod", declaró Vyacheslav Gladkov, Gobernador en funciones de la región de Belgorod.
Movimiento de tropas rusas y retirada hacia Donetsk
Según el Ministerio de Defensa ruso, este fin de semana han comenzado a reagrupar sus tropas desde Járkov a la región de Donetsk, justo al sur, para concentrar allí sus esfuerzos militares, mostrando en un mapa la importante retirada del Ejército ruso de la región de Járkov.
Mientras tanto, un fiscal ucraniano no identificado afirma que hay presuntos crímenes de guerra rusos en los pueblos liberados en la región de Járkov. La policía que investiga la muerte de civiles asegura que podrían haber sido torturados.