Por Crispian Balmer y Angelo Amante
ROMA, 8 nov - Los migrantes de uno de los cuatro barcos de rescate humanitario a los que Italia ha denegado el acceso a un puerto seguro pudieron desembarcar el martes tras una semana en el mar, dijo el grupo alemán que opera el barco.
El barco Rise Above atracó en el puerto de Reggio Calabria, en la punta de Italia, poco después del amanecer y las 89 personas que había recogido en el Mediterráneo fueron desembarcadas.
"Estamos aliviados de que las personas rescatadas finalmente estén a salvo en tierra", dijo en un comunicado la organización benéfica alemana Mission Lifeline, que administra el Rise Above, condenando lo que llamó un "juego político indigno" que los mantuvo en el mar.
El Gobierno de la primera ministra Giorgia Meloni, que lleva dos semanas en el cargo, ha actuado con rapidez para imponer medidas enérgicas contra la migración en barco, diciéndoles a las embarcaciones de las organizaciones humanitarias que navegan regularmente por el Mediterráneo que lleven a las personas rescatadas a otros países.
En una señal de que su campaña contra las ONG estaba surtiendo efecto, la organización benéfica española Salvamento Marítimo Humanitario dijo que pospondría una misión prevista de rescate en el mar debido al riesgo de que su barco fuera incautado por las autoridades italianas.
El ministro de Transportes de Italia, Matteo Salvini, líder del partido antiinmigración Liga, aplaudió el hecho. "Adelante así. Italia no será cómplice de la trata de personas. ¿Alguien empieza a entenderlo?", tuiteó.
El Gobierno de Meloni inicialmente forzó a cuatro barcos a permanecer en el mar y, aunque permitió que dos atracaran en Sicilia el fin de semana, solo ha dejado salir a algunos migrantes, principalmente mujeres y niños, dejando a unos 250 todavía a bordo.
Los capitanes de los dos barcos, uno operado por la organización humanitaria alemana SOS Humanity y el otro por la francesa Médicos Sin Fronteras (MSF), rechazaron las órdenes de hacerse a la mar nuevamente con los migrantes restantes y están impugnando el edicto en los tribunales.
Un tercer barco, el Ocean Viking, operado por la organización humanitaria francesa SOS Méditerranée, permanece frente a la costa de Sicilia con unos 234 inmigrantes a bordo. Fueron recogidos del mar frente a Libia hace 17 días y han pedido repetidamente el acceso a un puerto italiano.
El Rise Above es una embarcación mucho más pequeña que los otros tres barcos de rescate y sus pasajeros habían sufrido mucho tras las recientes marejadas, dijo Mission Lifeline.
Las agencias de la ONU para la migración y los refugiados hicieron un llamamiento a Italia el lunes para que permita que desembarquen todos los inmigrantes varados y agregaron que todos los "Estados interesados" deberían asumir la responsabilidad de los recién llegados.
Italia ha experimentado un fuerte aumento en las llegadas de migrantes este año, con unas 88.000 personas llegando en 2022 frente a las 55.000 del mismo período del año pasado, según datos oficiales.
La mayoría de ellas provienen de Egipto y Túnez, e Italia dice que la mayor parte de los migrantes no huye de la guerra o la discriminación, sino que buscan una vida acomodada en Europa.
Los rescates realizados por grupos de ayuda representaron alrededor del 15% de los migrantes que desembarcaron en Italia este año, según Naciones Unidas.