La marcha formada por cuatro columnas discurrió por las principales arterias hasta el centro de la capital española. La manifestación reclama al Gobierno del conservador Partido Popular de Isabel Díaz Ayuso que deje de desmantelar la sanidad pública.
Una marea blanca de decenas de miles de vecinos se ha levantado este domingo contra el deterioro de la sanidad pública en la Comunidad de Madrid.
La marcha formada por cuatro columnas discurrió por las principales arterias hasta el centro de la capital española. La manifestación reclama al Gobierno del conservador Partido Popular de Isabel Díaz Ayuso que deje de desmantelar la sanidad pública.
Uno de los puntos más controvertidos de las medidas del ejecutivo regional es la de dejar 29 centros de salud madrileños con unas urgencias en las que solo haya una enfermera y el médico atienda por videollamada.
"Faltan recursos sobre todo personales, falta mucho personal, falta también material, falta formación y tranquilidad y cuidado hacia los profesionales y hacia el paciente, claro está", señala una de las manifestantes.
Ayuso ha acusado a los médicos de boicotear la reapertura de las urgencias hospitalarias. Cuando los médicos señalan que el problema ya existe.
El día 21 de noviembre está convocada una huelga indefinida para 5000 médicos y pediatras de la Atención Primaria madrileña que se sumaría a la que ya existe desde este 7 de noviembre y que efectúan más de 200 facultativos de los antiguos Servicios de Urgencia de Atención Primaria y Servicios de Atención Rural.