Un grupo de diputados de la oposición surcoreana ha viajado a Tokio para expresar su desacuerdo ante diferentes instituciones japonesas.
Este lunes han continuado las protestas en Japón contra el vertido al Océano Pacífico de más de un millón de toneladas de agua contaminada depurada de la central nuclear de Fukushima.
Decenas de personas se han manifestado frente a la sede del Gobierno, después de que el Organismo Internacional de la Energía Atómica presentara la semana pasada un informe que certifica que el plan del ejecutivo nipón cumple con los estándares de seguridad.
No opinan lo mismo China, Corea del Norte o el principal partido de la oposición de Corea del Sur. Un grupo de sus diputados ha viajado a Tokio para expresar su desacuerdo. Más del 80% de la población de este país rechaza el proyecto.