Aumentan las manifestaciones desde que el líder de la oposición Ousmane Sonko fue acusado de insurrección y su partido disuelto. La policia ha matado al menos a quince manifestantes en las calles.
El Gobierno senegalés cortó internet para contrarrestar lo que llamaron mensajes "de odio y subversivos".
Ousmane Sonko es candidato en las elecciones presidenciales del año que viene y un feroz crítico del actual presidente senegalés Macky Sall.
Denuncia la "instrumentalización" partidista de la justicia para apartarle de las elecciones.
Critica la mala gobernanza, la corrupción y el neocolonialismo francés y cuenta con muchos seguidores entre los jóvenes de Senegal.
Ha sido condenado en ausencia por cargos de corrupción moral y tiene una larguísima serie de acusaciones de la fiscalía por las que será procesado.
El mes pasado, Macky Sall anunció que no concurrirá a un tercer mandato, pero se espera que promueva y respalde a un candidato de su partido.
La agitación política ha sacudido a un país considerado durante mucho tiempo un bastión de la democracia en África occidental.
Senegal es una de las naciones africanas involucradas en un esfuerzo conjunto para poner fin a un golpe militar en Níger.