La ministra del Interior de Alemania presentó un paquete de medidas que tienen como objetivo agilizar e incrementar las deportaciones de los extranjeros que se encuentran en el país de forma irregular.
Alemania da un paso adelante en la lucha contra la inmigración ilegal. La ministra del Interior, Nancy Faeser, ha presentado un paquete de medidas para acelerar y aumentar las expulsiones de extranjeros que se encuentran en el país en situación irregular:
"Para proteger el derecho fundamental al asilo, debemos limitar considerablemente la inmigración irregular. Quienes no tienen derecho a quedarse deben volver a abandonar nuestro país. El número de repatriaciones de este año es ya un 27% superior al del mismo periodo del año pasado. No obstante, es necesario actuar".
El paquete, que todavía deberá recibir el visto bueno del Parlamento, incluye medidas como la extensión de la detención administrativa de quienes vayan a ser expulsados de 10 a 28 días o la eliminación de la necesidad de informar de antemano de una deportación, para evitar que los afectados se escondan.
También se simplificarán los requisitos legales para expulsar a sospechosos de pertenecer a organizaciones criminales, a traficantes de personas o a individuos que hayan infringido prohibiciones de ingreso o estancia al país.