Las autoridades de Gaza, dirigidas por la organización islamista Hamás, afirman que queda apenas un 10 % de agua potable. Para intentar sobrevivir, y a pesar de los riesgos, algunas personas beben agua del mar.
Las condiciones en la Franja de Gaza empeoran día a día. Los ciudadanos carecen de todo, especialmente de agua potable. Las autoridades de Gaza, dirigidas por la organización islamista Hamás, afirman que queda apenas un 10 % de agua potable. Para intentar sobrevivir, y a pesar de los riesgos, algunas personas beben agua del mar.
"No tenemos agua, a causa de la guerra. Venimos aquí a beber agua del mar, aunque sea insalubre, pero necesitamos agua, sea cual sea la fuente de origen", declara Dina Abu Alaraj, adolescente que reside en Gaza.
Los bombardeos de la ofensiva israelí, en marcha desde el 7 de octubre, día de los mortíferos ataques de Hamás contra Israel, han destruido las infraestructuras sanitarias de la Franja de Gaza, y la mayoría de los pozos de agua. Además, las inundaciones de los últimos días en la zona, causadas por un intenso temporal, tampoco han ayudado. UNICEF señala que los menores también necesitan, de manera urgente, alimentos, medicinas, mantas y ropa de abrigo.