Los agricultores que han llegado hasta Bruselas este jueves insisten en que su protesta será pacífica.
PUBLICIDADConvoyes de tractores con cientos de agricultores han llegado hasta la sede de la Unión Europea para trasladar sus quejas sobre la regulación y los costes excesivos a los líderes comunitarios que se reúnen en una cumbre este jueves en Bruselas.
Tras pasar la noche entre fogatas improvisadas para entrar en calor, los agricultores montaron en sus vehículos y entraron a la capital belga con el estruendo de motores y bocinas a todo volumen, que interrumpieron el sueño de muchos residentes en plena madrugada, tras semanas de protestas por toda Europa.
Las demandas agrícolas se abren hueco en la agenda de la cumbre europea
Aunque la cumbre europea debía centrarse en la ayuda financiera a Ucrania, las protestas de los agricultores han propiciado que el tema se incluya en la agenda de los 27 líderes comunitarios, según señaló Alexander De Croo, el primer ministro de Bélgica, que ocupa actualmente la presidencia de la UE.
“Debemos asegurarnos de que (los agricultores) puedan obtener el precio correcto por los productos de alta calidad que ofrecen. También debemos asegurarnos de que la carga administrativa que tienen sea razonable”, añadió De Croo.
Aunque no se esperan grandes concesiones inmediatas, las protestas ya han tenido un impacto: la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, anunció el miércoles que planea proteger a los agricultores frente a las importaciones baratas procedentes de Ucrania en el contexto de la invasión rusa, y además tiene la intención de permitirles utilizar algunas tierras que estaban forzadas a permanecer en barbecho por razones ambientales.
Los planes aún deben ser aprobados por los 27 Estados miembros del bloque y el Parlamento Europeo, pero representan un gesto inmediato y con poder simbólico.
La mayoría de los manifestantes son jóvenes agricultores con familias, que se sienten cada vez más presionados por un amplio abanico de desafíos, entre ellos, los crecientes precios de la energía, la competencia extranjera más barata que no tiene que cumplir con las estrictas normas de la UE, la inflación y las consecuencias del cambio climático, como la sequía, los incendios o las inundaciones.
Durante la mayor parte de la semana las protestas han continua provocando alteraciones en el tráfico en varios países europeos. Los agricultores bloquearon nuevamente vías estratégicas en Bélgica, Francia e Italia el miércoles.
Aunque el descontento se ha expresado de manera generalmente pacífica, la Policía francesa arrestó a 91 manifestantes que irrumpieron el miércoles en el mercado de Rungis, al sur de París, que es el centro mayorista de distribución de alimentos más grande de Europa.