La Bundeswehr quiere invertir en nuevos equipos, sistemas de defensa antimisiles y vehículos de combate de infantería. La Comisión de Presupuestos ha dado luz verde a estos proyectos multimillonarios. Para la oposición, se trata de "adquisiciones sin pies ni cabeza".
La Bundeswehr está adquiriendo una cantidad considerable de tanques de ruedas, obuses, munición para sistemas de defensa antiaérea y satélites. La Comisión de Presupuestos del Bundestag ha aprobado 50.000 millones de euros para armamento de las Fuerzas Armadas alemanas, la Bundeswehr. Se trata de un total de 30 proyectos de adquisición.
Los proyectos más amplios incluyen el sistema de radar por satélite Spock, que será suministrado por Rheinmetall, hasta 876 vehículos blindados de ruedas 6x6 del fabricante finlandés Patria en varias versiones y hasta 500 obuses de ruedas RCH155, que serán fabricados por una empresa conjunta entre Rheinmetall y KNDS.
Las Comisiones de Defensa y Presupuestos también aprobaron la adquisición de misiles guiados para los sistemas de defensa antiaérea Patriot (dos mil millones de euros) e Iris-T SLM, un nuevo lote de vehículos de combate de infantería Puma, vehículos de mando Eagle y drones de reconocimiento Quantum Systems.
Se han destinado 4.000 millones de euros a la ampliación del sistema de defensa antimisiles Arrow 3. Más de 4.000 millones de euros para la adquisición de nuevos vehículos de combate de infantería Puma (2ª serie).
Equipamiento para los futuros soldados
La adquisición de ropa y equipo para 460.000 soldados, que corresponde al futuro objetivo de personal de la Bundeswehr, también supondrá una proporción significativa. Además, hasta 80.000 empleados civiles de la Bundeswehr también serán equipados con equipos de protección. "Hablamos en serio cuando decimos que estamos equipando a nuestra Bundeswehr para que sea potente y resistente, y lo más rápidamente posible", declaró el Ministro de Defensa, Boris Pistorius (SPD).
Según el Ministerio de Defensa, este año se han iniciado grandes proyectos de armamento por un volumen total de 82.980 millones de euros. En los últimos tres años, se ha invertido un total de 188.400 millones de euros en la industria de defensa.
La oposición criticó duramente el planteamiento del Gobierno federal. El portavoz de política presupuestaria del grupo parlamentario de Los Verdes en el Bundestag, Sebastian Schäfer, explicó que las "compras navideñas del Ministerio de Defensa" demuestran claramente "por qué el Tribunal Federal de Cuentas ha advertido en repetidas ocasiones que los recursos financieros ilimitados no deben conducir a adquisiciones sin sentido".
Como ejemplo, citó el pedido de más vehículos de combate de infantería Puma: "La Bundeswehr encarga ahora 200 Puma adicionales, aunque la disponibilidad operativa de los sistemas existentes es baja", dijo Schäfer.
Se trataba de 50.000 millones de euros en gastos, anticipos a la industria por un total de 5.000 millones de euros "bajo justificaciones a veces endebles" e innumerables autorizaciones de compromiso sin cubrir, dijo Schäfer.
Las construcciones contractuales, los planes de cooperación y los proyectos de desarrollo constan a menudo de varios centenares de páginas, que deben ser procesadas y comprobadas por los políticos de defensa y los responsables presupuestarios en un plazo muy breve. "Esto no es posible de forma seria", dijo Schäfer. Todos los proyectos se financian mediante préstamos y los riesgos financieros asociados a las adquisiciones son considerables.
También se critica el establecimiento de prioridades. Por ejemplo, se cuestiona si tiene sentido adquirir ahora ropa y equipo para 460.000 soldados cuando aún faltan varios años para alcanzar el objetivo de número de tropas.