Europa debe ser dueña de su destino. Con este espíritu se han reunido en París la canciller alemana, Angela Merkel, y el flamante presidente francés, Emmanuel Macron. La primera se ha mostrado dispuesta a reactivar el eje-franco alemán, el otrora principal motor de la construcción europea, y ha prometido que habrá una cooperación más estrecha entre Francia y Alemania.
En lo que respecta a las ambiciosas propuestas de Macron para la UE, Merkel ha asegurado estar dispuesta a discutir sobre uno de sus puntos más polémicos: la creación de un presupuesto y de un ministerio de finanzas para la zona Euro.
- “Creo que hemos demostrado que estamos preparados para dar un nuevo impulso a las relaciones franco-alemanas”, ha sentenciado.