Tiene cuatro mil kilómetros cuadrados, se separó de la costa antártica en 1986 pero se asentó en el mar Weddell pasando a ser una isla de hielo.
En los últimos meses, el iceberg, catalogado como A23a, ha sido empujado por vientos y corrientes y ahora pasa por la punta norte de la Península Antártica.
Irá casi con toda seguridad a la Corriente Antártica Circumpolar, que lo arrojará hacia el Atlántico Sur.