La Policía Judicial cree que el adolescente actuó por "frustración" por sus malos resultados escolares y dificultades para socializar, pero no descarta una actuación en grupo.
Un adolescente de 14 años, residente en la localidad de Seidões, en el municipio de Fafe, es el principal sospechoso de provocar varios incendios forestales en el norte de Portugal. Según la Policía Judicial, el joven solía desplazarse en patinete eléctrico por los montes de la zona y tenía la costumbre de encender cerillas en el campo y huir. Los investigadores lo señalan como responsable de los fuegos registrados en su parroquia y en las de Ardegão y Arnozela.
El menor ya ha confesado los hechos. "El joven pudo haber actuado movido por la rabia y la frustración derivadas de su bajo rendimiento escolar y de la precariedad de sus relaciones sociales", indicó la Policía Judicial en un comunicado, aunque no descarta que pudiera haber actuado acompañado.
Los repetidos incendios en esta región desencadenaron una investigación. "Durante el verano, estas parroquias fueron sistemáticamente asoladas por el fuego, en ocasiones a diario, lo que generó gran preocupación entre los vecinos y arrasó varias hectáreas de bosque", añade la nota oficial.
La investigación, dirigida por la Policía Judicial de Braga, ha sido remitida al Ministerio Público, que a su vez trasladó el caso al Tribunal de Familia y de Menores. Hasta el 20 de agosto, las autoridades habían detenido a 52 personas sospechosas de provocar incendios, la mayoría en ese mismo mes, según datos recopilados por la agencia de noticias Lusa.
El incendio de Vinhais está bajo control
En los últimos días, los incendios parecen haber dado una tregua a los Bomberos y a la población, al igual que en España, por la mejora de la climatología. Este viernes por la mañana, había 97 incendios activos, pero casi todos cerca de su extinción.
El incendio de la parroquia de Rebordelo, en el municipio de Vinhais, es el único que sigue activo. A primera hora de la mañana, había movilizado a más de 400 bomberos, 140 vehículos y seis medios aéreos. El fuego, que comenzó el martes por la mañana, tiene tres frentes activos, uno de ellos de difícil acceso. Por lo demás, el incendio tiene "gran parte de su perímetro controlado", según declaraciones del comandante subregional de Trás-os-Montes de Protección Civil a la agencia Lusa.
Las temperaturas han descendido significativamente en la Península Ibérica durante la última semana. Este viernes se esperan entre 14°C y 32°C, con cielos nublados en la mayor parte del país. Aún así, el Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera (IPMA) sitúa todo el interior y el sur del país en riesgo máximo y muy alto de incendio.