Daniel Chu Owen y Susan Murabana instalan su telescopio móvil.
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Daniel Chu Owen y Susan Murabana instalan su telescopio móvil. Juntos han creado una organización cuyo objetivo es inspirar a las próximas generaciones de astrónomos. Daniel y Susan recorren ahora aldeas remotas de Kenia para que los niños puedan contemplar por primera vez el cielo.
“Nuestro objetivo es llegar al mayor número posible de escuelas, al mayor número posible de niños. Pero no solo para que descubran la astronomía sino para que descubran la ciencia. Eso es lo más importante. Para ello, uno de los mejores instrumentos que tenemos es el telescopio. Tiene unos 400 años de historia y poca gente ha tenido la oportunidad de mirar a través de uno de ellos. Muchos niños en Kenia nunca han podido hacerlo”, explica Murabana.
Durante la noche, uno a uno, los niños de las aldeas utilizan por primera vez un telescopio. Las imágenes son muy diferentes a las de los libros.
“Ver en la red las imágenes más recientes de Plutón es algo increíble. Se encuentra muy lejos de nuestro planeta. Pero ver directamente con nuestos ojos este tipo de imágenes es aún mejor. Como digo, a través del telescopio podemos ver imágenes fantásticas, increíbles”, asegura Owen.
Los estudiantes también asisten a una charla sobre ciencia y astronomía.
“Cuando entré en la tienda ví Mercurio y también vimos la Luna. Vimos todo esto en la proyección de un video. Tuve ganas de cambiar de planes y estudiar astronomía porque es algo fantástico”, afirma una estudiante.
La experiencia de estos jóvenes fue todavía más intensa cuando gracias a unos cascos y a la realidad virtual pudieron seguir descubriendo increíbles imágenes del Universo.