22 nov - El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, y la gobernadora del banco central Lael Brainard, mencionaron el lunes el impacto corrosivo que la alta inflación está teniendo en la economía y las familias estadounidenses, en lo que puede ser una señal de que controlar la rápida alza de precios es ahora la principal prioridad.
En breves comentarios después de la nominación de Powell por parte del presidente Joe Biden a un segundo mandato como jefe de la Fed y la de Brainard como vicepresidenta del banco central, cada uno enfatizó en su percepción de cuán dañina se ha vuelto la inflación.
"Sabemos que la alta inflación afecta a las familias, especialmente a las que tienen menos capacidad para cubrir los mayores costos de los productos básicos, como alimentos, vivienda y transporte", dijo Powell en comentarios junto a Biden y Brainard.
"Usaremos nuestras herramientas tanto para apoyar la economía -un mercado laboral fuerte- como para evitar que se arraigue una inflación más alta".