El propietario de X visitó el campo de exterminio nazi de Auschwitz para rendir homenaje a las víctimas del Holocausto. El multimillonario había sido objeto de polémica por la publicación de contenido antisemita en su red social.
El magnate Elon Musk, acusado de permitir mensajes antisemitas en X, la red social de la que es propietario, visitó este lunes el campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, donde depositó flores y participó en una breve ceremonia conmemorativa.
La visita de Musk al lugar más notorio de los horrores del Holocausto se produjo antes de un intervención programada para el mismo lunes en una conferencia sobre antisemitismo organizada por la Asociación Judía Europea en la cercana ciudad polaca de Cracovia, antes de la celebración el 27 de enero del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto.
El multimillonario ha enfrentado acusaciones de entidades como la Liga Antidifamación, una destacada organización judía de derechos civiles, de tolerar mensajes antisemitas en la plataforma X, anteriormente conocida como Twitter, desde que la compró en 2022.
Musk fue ampliamente criticado en noviembre, incluso por la Casa Blanca, tras responder en X con el comentario "Has dicho la verdad real" a un usuario que acusó a los judíos de incitar al odio contra los blancos. Posteriormente se disculpó y calificó la publicación como la "más tonta" que jamás haya hecho.
Además, varias grandes marcas, incluidas Disney e IBM, dejaron de anunciarse en la plataforma el año pasado, después de que el grupo Media Matters dijera que sus anuncios aparecían junto a contenido pronazi y publicaciones nacionalistas blancas. Desde entonces, X ha demandado a Media Matters, bajo el argumento de que la organización sin fines de lucro con sede en Washington elaboró malintencionadamente el informe con el propósito de "expulsar a los anunciantes de la plataforma y destruir X Corp".
Más de 1,1 millones de personas fueron asesinadas por los nazis en Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial. La mayoría de los asesinados eran judíos, pero entre las víctimas también hubo polacos, romaníes, prisioneros de guerra soviéticos y otros. En total, alrededor de 6 millones de judíos europeos murieron durante el Holocausto. Cuando los soviéticos liberaron el campo, encontraron unos 7.000 supervivientes.