“Hay encuentros breves, que dejan una huella indeleble. Ban Shrei Pitch tenía 13 años, cuando la conocí, ojos tristes y mucha determinación. Vivía a 45 km de Phnom Pehn, en una casita de madera y suelo de tierra. Sus padres habían muerto y ella, como muchos otros niños de su edad, se había visto obligada a trabajar desde los 8 años en un campo de jazmín. Su hermanastro, enfermo no podía cuidar más de ella. Por suerte, Ban Shrei fue admitida en Happy Chandara, estudia en Khemer, en francés y en inglés de lunes a viernes y los fines de semana vuelve a casa con su hermanastro.
Muy seria y muy convencida, me dijo “yo seré intérprete o médico”. La acompañamos a su casa. No tenían nada de comer y sin embargo nos ofrecieron los frutos del único árbol del jardín, y una pulsera de jazmín. Fueron 20 segundos en un reportaje y un abrazo sincero y lleno de esperanza que te queda dentro para siempre.”
Aurora Velez

Por Euronews