Según el régimen comunista lo que está realizando el país americano muestra la empedernida repugnancia y hostilidad que siente EE.UU hacia Corea del
Según el régimen comunista lo que está realizando el país americano muestra la empedernida repugnancia y hostilidad que siente EE.UU hacia Corea del Norte.
Las nuevas medidas anunciadas por la Casa Blanca en respuesta al ciberataque a Sony afectan a tres entidades norcoreanas, incluida una agencia de espionaje gubernamental.
El Gobierno de Barack Obama atribuye a Corea del Norte el ciberataque y cree que fue en respuesta a “The Interview”, una comedia sobre un complot estadounidense para asesinar al líder norcoreano, Kim Jong-un.
Pyongyang, a pesar de haber criticado duramente el estreno de la película, ha repetido en varias ocasiones que no es responsable de los ataques informáticos al estudio cinematográfico y ha pedido a EE.UU que demuestre sus acusaciones.
Según el FBI el país asiático estuvo detrás del ataque aunque algunos expertos en tecnología señalan a exempleados de Sony Pictures como responsables.