En Indonesia, los dos australianos condenados a muerte por tráfico de drogas han sido trasladados a la isla prisión de Nusakambangan donde serán
En Indonesia, los dos australianos condenados a muerte por tráfico de drogas han sido trasladados a la isla prisión de Nusakambangan donde serán ejecutados. La fecha para su fusilamiento aún está por determinar.
Myuran Sukumuran, de 33 años, y Andrew Chan, de 31 años, se encontraban en una cárcel de Bali. Forman parte de la decena de ciudadanos extranjeros condenados a la pena capital por narcotráfico.
Su posible ejecución ha provocado fuertes tensiones diplomáticas entre Indonesia y Australia. El Gobierno de Tony Abbott ha advertido de que podría llamar a consultas a su embajador en Yakarta.
“Odiamos los delitos de drogas, pero también aborrecemos la pena de muerte. Pensamos que estos dos australianos merecen ser castigados, pero no ser ejecutados. Esa es nuestra posición. A millones de australianos se les deben revolver las tripas ante la perspectiva de la ejecución de estas dos personas”, ha declarado el primer ministro australiano, Tony Abbott.
Entre la decena de condenados hay también
un filipino, un nigeriano, un francés y un brasileño. Cuarenta y dos organizaciones pro derechos humanos han pedido a Indonesia que suspenda las ejecuciones, reinstale la moratoria y suprima la pena de muerte.