Nerviosismo económico en el Reino Unido a pocos días de las elecciones

A menos de una semana para las elecciones en el Reino Unido, las malas noticias económicas pueden desempeñar un papel fundamental. De hecho, el conservador David Cameron ha hecho de la fortaleza nacional uno de sus principales valores a la hora de luchar por la reelección.
Este viernes se ha conocido que la actividad industrial ha sufrido su frenazo más importante en dos años. El indice PMI de Markit de abril se situaba en 51,9, frente al 54 de marzo. A ello se une la ralentización del crecimiento nacional en el primer trimestre de 2015, únicamente del 0,3% del PIB, cuando en el trimestre anterior fue del 0,6%.
“Es algo decepcionante, con un 0,3 por ciento estimado para el primer trimestre El indice PMI está a la baja. ¿A quién se puede culpar? Con seguridad a una libra esterlina tan fuerte. Europa aún no se está recuperando en su totalidad. También hay algo de recelo entre los consumidores y los negocios ante las elecciones. Creo que es un círculo vicioso”, explica Jan Randolph, de IHS Global Insight.
Otros datos procedentes del Banco de Inglaterra muestran un aumento de los prestamos entre los consumidores en marzo, con la mayor aceleración desde el inicio de la crisis financiera. Sin embargo, los expertos advierten de que esta subida se debe especialmente a los llamados “préstamos no garantizados”, es decir, que no se invierten en bienes que los puedan cubrir.
Los más optimistas no obstante culpan de esta mala tendencia al tradicional nerviosismo que afecta al sector económico nacional en periodos previos a las elecciones. Como ejemplo, en marzo los inversores sacaron un 1.000 millones de libras del Reino Unido para posicionarlos en el resto de Europa.