Una huelga de seis días paraliza dos tercios de los trenes alemanes

Colas interminables frente a los mostradores, trenes llenos y andenes vacíos. Es el resultado de la huelga ferroviaria más larga de la historia de Alemania. Un parón que ha empezado este martes y que acabará el domingo a las 09:00, hora central europea.
Dos tercios de los trenes de cercanías y largo recorrido están parados.
“Hemos conseguido que un tercio de nuestros trenes de larga distancia vuelvan a circular. En algunas estaciones hemos facilitado trenes para que la gente duerma en ellos, aquí en Berlín, en Munich, Colonia y Hamburgo para los clientes a los que no les hemos podido dar una habitación de hotel”, decía el portavoz de la Deutsche Bahn, Achim Stauss.
La huelga convocada por el sindicato de maquinistas afectará a unos 30 millones de pasajeros y se calcula que el parón de los trenes de mercancías provocará unas pérdidas de hasta 500 millones de euros a la economía alemana.
“No lo entiendo. Desde el martes hasta el domingo es mucho tiempo. Uno o dos días está bien pero esto es una locura”, decía un afectado.
“Quería ir a Italia a pasar una semana de vacaciones pero no podré ir y si lo consigo será tan tarde que no podré coger el tren para Italia. Por eso me voy a casa y lo volveré a intentar mañana”, añadía otra.
Esta huelga es la octava desde julio que convoca el sindicato de maquinistas. Un colectivo que supone el 10% de la plantilla de la compañía y que reclama un incremento salarial del 5%, la reducción de su semana laboral y la limitación de las horas extras.