Hungría ha terminado de levantar la valla de alambre de espino en su frontera con Croacia. El cierre total de los pasos fronterizos entre ambos
Hungría ha terminado de levantar la valla de alambre de espino en su frontera con Croacia. El cierre total de los pasos fronterizos entre ambos países podría producirse este domingo.
Desde mediados de septiembre, cuando Hungría cerró su frontera con Serbia, han entrado en el país desde Croacia 100.000 refugiados.
Las autoridades húngaras están instalando “zonas de tránsito”, donde las solicitudes de asilo serán revisadas en menos de 48 horas. En caso de rechazo, los migrantes serán devueltos a Croacia.
El primer ministro croata, Zoran Milanovic, ha dicho que “el problema debe resolverse en Turquía y Grecia”. “Alguien dijo que debería enviarse el Ejército a la frontera húngara con Croacia y Serbia. Se deben enviar barcos a Grecia”, ha añadido.
Una vez Hungría cierre su frontera con Croacia, las miles de personas que pretenden llegar a Europa Occidental, huyendo de la guerra o la miseria, deberán buscar una ruta alternativa.
En el sur de Serbia sigue habiendo colas.
Miles de migrantes y refugiados han llegado a Presevo en las últimas horas horas. Se trata de sirios, afganos e iraquíes que han entrado en Serbia a través de Macedonia.
En la última semana más de 25.000 refugiados han llegado a Serbia.