A escasos días de la victoria del partido conservador islámico AKP en las legislativas turcas, el presidente Erdogan busca pasar a la historia con un
A escasos días de la victoria del partido conservador islámico AKP en las legislativas turcas, el presidente Erdogan busca pasar a la historia con un sistema presidencialista que le confiera más poder ejecutivo. La reforma constitucional, sin embargo no le resultará fácil sin el apoyo de los partidos de oposición.
“Espero que los líderes de los partidos de la oposición se sienten a trabajar en la nueva Constitución. Quienes se resistan a la voluntad del pueblo por una nueva Constitución, tendrá que rendir cuentas en las próximas elecciones dentro de cuatro año.” declaró en el Palacio Presidencial Erdogan, quien necesitaría para convocar un referéndum de reforma constitucional las tres quintas partes de los escaños del parlamento.
Este martes, en una vasta redada la policía turca detuvo a más de cuarenta policías y altos funcionarios en el marco de una investigación contra el predicador Fethulah Gülen, enemigo jurado del presidente Erdogan, exiliado en EE.UU y sobre el que pesa una orden de arresto.
Al forcejeo político, Erdogan añade más tensión militar contra la rebelión kurda al sur del país y en la frontera con Irak donde se han producido diversos incidentes armados.
La aviación turca ha bombardeado posiciones del PKK en la provincia de Hakkari, donde, según el Ejército turco, tendrían por objetivo destruir refugios y lugares ocultos con armamento de los rebeldes kurdos.