Papa Noel viaja también a Damasco

A unos kilómetros de las batallas y los combates, en Damasco, algunos voluntarios disfrazados de Papa Noel tratan de llevar la ilusión a los más pequeños, victimas indirectas del conflicto que vive el país. Este barrio luce, además, una curiosa estampa: sus calles se han adornado con luces navideñas, a pesar de los frecuentes cortes de luz que sufren en la zona.
“Estamos repartiendo regalos entre los chicos. Hay niños cuyos padres han muerto en este conflicto, que son ahora huérfanos. Intentamos dar regalos a todos los niños, en general. Es una manera de hacerles olvidar la guerra”, señala un voluntario.
La noche del 24 también ha sido aprovechada por algunos cristianos para acudir a esta iglesia. Los cristianos representan un 11% del total de la población siria. Desde la irrupción del autoproclamado Estado Islámico, en 2011, son muchos los que han escondido sus creencias para evitar posibles represalias.