Corea y Japón llegan a un acuerdo para compensar a las esclavas sexuales de la II Guerra Mundial

Japón y Corea del Sur fijaron en Seúl las condiciones para compensar a las miles de coreanas detenidas por el ejército japonés y obligadas a prostituirse antes y durante la II Guerra Mundial.
El ministro japonés de Asuntos Exteriores, Fumio Kishida declaró: “El primer ministro de Japón ha expresado de nuevo sus más sinceras disculpas y arrepentimiento a todas las mujeres que fueron sometidas a experiencias profundamente dolorosas y sufrieron heridas físicas y psicológicas incurables como mujeres de confort”.
Tokio se compromete a aportar unos siete millones seiscientos mil euros a un fondo de indemización a las víctimas.
Pero ni el dinero ni las “profundas disculpas” del Gobierno de Japón por el daño causado a las mujeres coreanas tomadas como prisioneras sexuales para uso de los soldados japoneses hace más de 70 años son suficientes para las asociaciones de defensa de las víctimas. Entienden que es una solución de compromiso tardía e insuficiente.