En una edición en la que el drama de los refugiados ha estado muy presente, la desgarradora película del italiano, Gianfranco Rosi, era la gran
En una edición en la que el drama de los refugiados ha estado muy presente, la desgarradora película del italiano, Gianfranco
Rosi, era la gran favorita. Mezcla de documental y ficción, pone rostro y nombre a las miles de personas que desembarcan en la isla de Lampedusa. “¡Es maravilloso! Nunca esperé esto. Hace dos años, cuando gané el León de Oro de Venecia, pensé que nunca volvería a vivir otro momento así”, confesaba a euronews.
El Oso de Plata ha ido a parar a la directora francesa, Mia Hansen-Løve, por “L’avenir”; la historia de una profesora de filosofía abandonada por su marido, magistralmente interpretada por Isabelle Huppert.
“Muerte en Sarajevo” del bosnio Danis Tanovic se ha alzado con el Premio Especial del Jurado. Una película que convierte el Hotel Europa de la capital bosnia en un microcosmos del hervidero balcánico.
“Este año, la crisis de los refugiados ha sido el leitmotiv del festival. Con la decisión de premiar una película documental que trata este tema, el jurado destaca la apuesta de la Berlinale de poner el foco en películas comprometidas”, concluye desde la capital alemana nuestro enviado especial, Wolfgang Spindler.