Un año de suspensión, con efecto inmediato de todas las actividades relacionadas con el fútbol.
Un año de suspensión, con efecto inmediato de todas las actividades relacionadas con el fútbol. Es el castigo que ha impuesto el Comité de ética de la FIFA al alemán Wolfgang Niersbach, miembro del Consejo del organismo y expresidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), alegando que no denunció “de forma puntual” supuestas irregularidades durante el proceso de selección de Alemania como sede del Mundial de 2006.
Inicialmente, la cámara de investigación del Comité de Ética había solicitado una suspensión de dos años.
Niersbach fue considerado en 2015 como posible aspirante a la presidencia de la UEFA, hasta que las acusaciones relacionadas con el Mundial volvieron a ganar fuerza.