Abdel Malik Petitjean, un joven de 19 años fichado desde hace un mes como yihadista, es el segundo de los terroristas que el pasado martes degollaron a un sacerdote e hirieron gravemente a otra person
Abdel Malik Petitjean, un joven de 19 años fichado desde hace un mes como yihadista, es el segundo de los terroristas que el pasado martes degollaron a un sacerdote e hirieron gravemente a otra persona en una iglesia del noroeste de Francia.
Petijean se había convertido al Islam recientemente. El otro atacante, Adel Kermiche, estaba en libertad bajo control judicial por haber intentado en dos ocasiones integrarse en grupos yihadistas. Ambos eran franceses, habían jurado lealtad al grupo Estado Islámico y fueron abatidos por las fuerzas del orden.
La hermana Danielle logró escapar del templo, en el que había cinco personas secuestradas:
- “Tuvimos mucho miedo, sobre todo cuando entraron. Pensamos que se acababa todo. Cuando los vi entrar me dije “ya está, se acabó. Tan enfurecidos estaban”. “Vosotros los cristianos, no elimináis, era un poco su estilo de expresión, sus gritos”.
La conmoción ha dado paso a la indignación tras conocerse que la Justicia dejó en libertad a Adel Kermiche a pesar de que la fiscalía insistió en que era un peligro para la sociedad. Petitjean, por su parte, había sido identificado como yihadista, pero no había ningún proceso abierto en su contra.