En Hungría las autoridades han detenido a un hombre de cincuenta y cinco años y nacionalidad ucraniana acusado de tráfico de personas.
En Hungría las autoridades han detenido a un hombre de cincuenta y cinco años y nacionalidad ucraniana acusado de tráfico de personas. Intentaba, presuntamente, introducir en el país de forma ilegal a treinta y tres migrantes originarios de Pakistán, Bangladesh y Afganistán. Ninguno de ellos tenía visado para poder entrar en Europa.
Aunque los hechos ocurrieron el pasado lunes hasta ahora la policía húngara no había informado de ello. La trama se descubrió cuando una patrulla de agentes detuvo el autobús que conducía el ahora detenido, cerca de la ciudad de Tolna.
Este tipo de sucesos se ha incrementado en los últimos meses. Algo que los analistas explican por el acuerdo alcanzado entre la Unión Europea y Turquía, que habría llevado a las mafias a buscar otras rutas alternativas y que nos dejan imágenes como estas: la de dos refugiados sirios escondidos en los bajos de un camión en la ciudad húngara de Roszke, muy cerca de la frontera con Serbia.