PUBLICIDADLas fricciones políticas entre Berlín y Ankara están afectando a las exportaciones desde Alemania y al turismo. Así lo ha advertido el grupo que representa a los exportadores germanos, aunque también ha especificado que no supondrá un duro revés para el comercio exterior. El intento de golpe de Estado en el país del Bósforo y la represión posterior dirigida por el presidente Erdogan han abierto una crisis entre dos naciones con estrechos lazos. A pesar de ello, el intercambio comercial entre ambos se incremento un 4,6% el pasado año, alcanzando los 37.300 millones de euros. Alemania es el principal socio comercial de Ankara y segundo mayor inversor tras los Países Bajos. Pero mientras que las exportaciones desde Turquía aumentan cada año alrededor de un 6,4%, las importaciones de bienes alemanes disminuyen un 2%.
La comunidad turca es la principal minorÍa en Alemania. Pero a pesar de los vínculos, el turismo hacia el sureste ha decrecido. En 2016, 3,9 millones de alemanes visitaron Turquía, mientras que el año previo habían sido 5,58 millones. El Ministerio de Exteriores de Alemania ha advertido este jueves del peligro de viajar a Turquía y acabar en la cárcel tras la detención de un activista germano.