Ángel María Villar, en detención provisional por un caso de corrupción, dimite como vicepresidente de la UEFA y la FIFA. Actualmente suspendido cautelarmente como presidente de la Federación Española de Fútbol tras su ingreso en prisión la semana pasada, Villar envió el miércoles sendas cartas a los organismos europeo e internacional renunciando a sus cargos
Villar llegó a ser presidente en funciones de la UEFA entre 2015 y 2016 sustituyendo al sancionado Michel Platini. En las elecciones posteriores, presentó su candidatura frente al futuro ganador Aleksander Ceferin pero la acabó retirando. Por su parte, en la FIFA fue responsable del comité organizador del Mundial de Rusia 2018, antes de que el nuevo presidente Gianni Infantino eliminara el cargo.
El que fuera presidente de la federación española durante veintinueve años se halla en la prisión madrileña de Soto del Real desde el 26 de julio, después de que el juez Santiago Pedraz decretara cárcel sin fianza para él, su hijo Gorka y el responsable económico de la federación, Juan Padrón, por haber desviado dinero de partidos de la selección española.