PUBLICIDADAl contrario que en anteriores jornadas de huelga intermitente en el aeropuerto barcelonés de El Prat, donde los controles de seguridad acumulaban colas de hasta una hora, el primer día de huelga indefinida de este lunes transcurre con esperas de solo diez minutos.
Un paro consecuencia, según los sindicatos, de una pésima gestión de la crisis por parte del Gobierno español.
“(El Gobierno) se ha quedado agazapado sin ninún tipo de reacción, y cuando ha querido reaccionar lo ha hecho de una manera desproporcionada”, asegura Diego Giráldez, responsable de Seguridad Privada en España del sindicato UGT.“Y creo que eso ha encadenado una situación de mayor crispación hacia los vigilantes, que en definitiva el Gobierno ha querido situar como culpables de una situación que desde UGT todos los días comentamos que la culpabilidad es de la nefasta política de contratación de seguridad privada que además es responsabilidad directa del Gobierno del Partido Popular”.
Por decisión del ejecutivo, se ha reforzado la presencia de la Guardia Civil para controlar el cumplimiento de los servicios mínimos establecidos del noventa por ciento.
Las protestas podrían extenderse a otros aeropuertos e instalaciones del país.
Ante la huelga indefinida en #ElPrat, el Gobierno continúa con el proceso de arbitraje obligatorio y el dispositivo de
guardiacivil</a></p>— Iñigo de la Serna (idlserna) 13 de agosto de 2017
“Nosotros hemos convocado huelga en los aeropuertos de Galicia, y evidentemente vamos a estar en la calle y vamos a convocar todas aquellas movilizaciones que los trabajadores del sector requieran”, anuncia Giráldez.
UGT se solidariza con los trabajadores de Eulen en El-Prat por “haber soportado estoicamente las presiones” https://t.co/gnxB1lR4uM
— UGT (@UGT_Comunica) 14 de agosto de 2017
Sobre el conflicto en el aeropuerto de El Prat, el Gobierno está atentando gravemente el ejercicio del derecho de huelga pic.twitter.com/EHBGIMgiBD
— Comisiones Obreras (@CCOO) 11 de agosto de 2017
El Gobierno amenaza con un arbitraje de obligado cumplimiento, mientras asegura estar negociando con los sindicatos las condiciones de los contratos de los servicios de seguridad en todo el país.