Mientras el llamado Estado Islámico ha reivindicado el atentado suicida contra instalaciones militares en Adén, en el sur del Yemen, la ONU ha pedido a Arabia Saudí el fin del embargo al que tiene sometido al país en guerra civil.
Los precios de productos básicos, como comida y carburante, se han disparado, lo que está causando mucho estrés y sufrimiento entre la población
Portavoz del ACNUR
El martes, un coche lleno de explosivos dejó al menos 6 muertos en el distrito de al-Mansoura. La base atacada es utilizada por efectivos de la coalición liderada por Arabia Saudí, que combate a los rebeldes hutíes.
Mientras en Sana, la capital, un bombardeo atribuido a esa coalición panárabe ha provocado daños en el sistema de navegación del aeropuerto internacional, y obligado a suspender temporalmente los vuelos humanitarios, aunque se podrá seguir utilizando. La ONU, por su parte, alerta de la degradación de las condiciones de vida de los civiles, una situación agravada por el bloqueo decretado por Riad.
William Spindler, Portavoz del ACNUR:
“ Con la interrupción del flujo comercial a escala nacional, los precios de productos básicos, como comida y carburante, se han disparado, lo que está causando mucho estrés y sufrimiento entre la población”
#Yemen border closures have made already critical conditions worse. UNHCR
SpindlerWilliam</a> appeals immediate access <a href="https://t.co/igKRwQWptX">pic.twitter.com/igKRwQWptX</a></p>— UNHCR News (
RefugeesMedia) 14 de noviembre de 2017
Desde 2015, el Yemen es escenario de una guerra entre las fuerzas leales al presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, reconocido internacionalmente, y los hutíes, que controlan la capital y zonas en el norte. El conflicto ha provocado más de 10.000 muertos, 150.000 desplazados y dejado a 18 millones de yemeníes dependientes de la ayuda internacional que ahora llega con dificultad debido al bloqueo de sus puertos y aeropuertos.