Medidas de seguridad sin precedentes en todas las grandes capitales europeas
En Madrid, se ha limitado la circulación de furgonetas y vehículos pesados, y el aforo para la tradicional celebración en la Puerta del Sol ha quedado reducido a 20.000 personas.
En Roma, las estrictas medidas de seguridad afectan a los principales monumentos y lugares frecuentados por los turistas, como el emblemático mercadillo de la Piazza Navona, visita obligada durante la Navidad romana.
En Londres, la principal preocupación es el macroespectáculo pirotécnico a orillas del Támesis, restringido a 100.000 personas que han tenido que comprar previamente su entrada. La seguridad en la capital británica es impresionante con policías uniformados y agentes de paisano.
En Alemania, tras las agresiones sexuales sufridas por centenares de mujeres hace dos años en Colonia, las autoridades han establecido "zonas seguras" en Berlín. Una demoninación polémica, criticada por los propios sindicatos policiales.
En Francia, hay 140.000 agentes desplegados para esta jornada de San Silvestre entre policías, gendarmes y los militares de la operación Centinela, puesta en marcha tras los primeros atentados que tuvieron lugar en París hace casi tres años.