El maestro italiano Riccardo Muti ha vuelto a dirigir a la Filarmónica de Viena en un impecable Concierto de Año Nuevo, que en esta ocasión ha contado con piezas inéditas de los Strauss. Optimismo y delicadeza para empezar 2018.
Riccardo Muti ha dirigido, por quinta vez el célebre concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena.
La batuta del maestro italiano ha imprimido carácter y optimismo a los valses y polkas de los Strauss, entre ellos siete piezas hasta ahora inéditas en su programa.
A esta cita que reúne en la sala dorada del Musikverein a la alta sociedad vienesa ha asistido el Gobierno austríaco en pleno, junto a diversos líderes europeos como sus invitados de honor.
Unos cincuenta millones de espectadores de noventa países la han podido seguir por televisión y radio. Y dar palmas entusiastas con la Marcha Radetzky, con la que siempre acaba el evento, que dentro de un año dirigirá el alemán Christian Thielemann.