Philip Wilson es el religioso católico de mayor rango sentenciado por este delito. En los años setenta no denunció a un sacerdote acusado por sus víctimas de abusos sexuales. Según el juez, lo hizo por proteger a la Iglesia.y no muestra arrepentimiento por ello.
Un arzobispo australiano, condenado por encubrir abusos sexuales de un sacerdote contra menores en los años setenta.
Philip Wilson, de 67 años, el religioso católico de mayor rango sentenciado por un caso de pederastia, cumplirá una pena de doce meses de privación de libertad, que podría pasar en su casa.
Estaba acusado de no haber denunciado a la policía los abusos cometidos por James Fletcher, que fue condenado por nueve delitos y murió en la cárcel en 2006.
Dos de sus víctimas contaron en su momento lo sucedido a Wilson, que no hizo nada. Según él, porque no les creyó, según el juez del caso, no investigó los hechos para proteger a la Iglesia y no muestra ningún tipo de remordimiento por ello.
Una comisión de investigación asegura que la Iglesia católica recibió quejas por abusos sexuales de 4500 personas contra casi dosmil sacerdotes entre 1980 y 2015.