La isla de Lombok se ha visto azotada este jueves por otro seísmo de magnitud 5,9 en la escala Richter según el Servicio Geológico Estadounidense, una cifra que asciende a 6,2 atendiendo a datos de la Agencia local
La isla de Lombok, en Indonesia, no levanta cabeza. Este jueves la región se ha visto azotada por otro seísmo de magnitud 5,9 en la escala Richter según el Servicio Geológico Estadounidense, una cifra que asciende a 6,2 atendiendo a datos de la Agencia local.
La sacudida llega cuando Lombok aún no se ha recuperado del temblor que el domingo pasado asoló la isla y que hasta ahora ya se ha cobrado más de 150 víctimas mortales. Los equipos de rescate continúan con sus tareas para localizar víctimas o supervivientes bajo los escombros de miles de casas derruidas.
La Agencia Nacional de Gestión de Desastres sigue valorando por el momento los daños causados por el desastre. En algunos casos las cifras extraoficiales hablan de más de 300 muertos, de ahí que se pida precaución a la hora de publicar datos sin confirmar. Este último seísmo se ha registrado en el norte de la ínsula, su hipocentro está bajo tierra firme, a 10 kilómetro de profundidad y no hubo riesgo de tsunami.